Salud y Naranja

Con la campaña  , las clemenules, la variedad más apreciada y la que más superficie ocupa en los campos castellonenses, llega la hora de las variedades tardías de clementinas y de las naranjas.

Según el delegado provincial de la Unió, Vicent Goterris, la producción provincial de naranjas suma alrededor de 100.000 toneladas –así lo recogen también las estadísticas de la Conselleria de Agricultura–, entre las variedades navel lanelate, navelate y valencia late. Si a estas se añaden las clementinas que se recolectan a partir de ahora, “las hernandinas y ortaniques”, concreta Goterris, que suman “unas 30.000 ó 40.000 toneladas”, la fruta que queda por recolectar en los huertos de la provincia alcanza unas 130.000 ó 140.000 toneladas.

Queda así por cosechar menos de un cuarto de la producción provincial de cítricos, que ronda las 600.000 toneladas, habituales de las últimas campañas. En principio, estas variedades no deberían verse afectadas por el bajo de precio de las clemenules, ya que la campaña está en un momento diferente. Por el momento, las cotizaciones de las ortaniques –de 0,118 a 0,165 euros el kilo, según la mesa de cítricos del Consulado de la Lonja de Valencia–, y la de las hernandinas –de 0,141 a 0,235 euros el kilo– son mejores que las de la clemenules, pero tampoco llegan a cubrir los costes, cifrados en 0,24 euros por kilo.

En las naranjas los precios son peores –de 0,118 a 0,188 euros el kilo para la navel lane late y entre 0,141 y 0,165 para la navelate (la valencia late ya no tiene precio oficial)–, pero sus costes de producción son menores. H